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jueves, 26 de diciembre de 2019

PROGRAMACIÓN DEL AGUA

En mi blog, encontraras temas para tú propio crecimiento interior. Si has llegado hasta aquí no es por casualidad. Tu decides si deseas quedarte.... Gracias por Ser y por estar. Reciban ahora mis bendiciones en AMOR Y SABIDURÍA DIVINA. Milton Ballesteros Maestro de Reiki

domingo, 26 de mayo de 2019

Alimentación consciente

Hay unos alimentos que nos ayudan a mantener la armonía interior, y otros que tienden a crear desarmonía.

No tengo ninguna intención de dictaminar qué tiene que comer cada uno, ni mucho menos; la mayoría de los médicos se ponen de acuerdo en decir que hay que comer de todo, y no voy a ponerlo en duda.

Pero sí quiero hablar de otros puntos de vista, y luego que cada uno elija qué hacer.








Antropológicamente no estamos preparados para asimilar algunos alimentos: no tenemos uricasa, la enzima que disponen todos los carnívoros y la mayoría de los omnívoros para poder descomponer el ácido úrico que se produce como consecuencia del consumo de carne; los intestinos de un carnívoro son sólo tres veces el largo de su tronco, están preparados para una rápida expulsión de los alimentos que se pudren con más facilidad y rapidez (alimentos como la carne), mientras que los intestinos nuestros son similares a los de un herbívoro, midiendo doce veces la longitud del tronco y asimilando lentamente los alimentos para tratar de tomar el máximo de nutrientes posibles (lo que significa que si los alimentos dejan residuos ácidos estos pasan a la sangre en mayor proporción); al mismo tiempo, los bolos alimenticios de una dieta carnívora al pasar tanto tiempo en los intestinos acaban fermentando y eso hace que asimilemos sustancias tóxicas; el hígado nuestro elimina entre diez y quince veces menos ácidos que otros animales no herbívoros; para tratar los ácidos nuestro cuerpo pone en hiperfunción al hígado y al bazo, y además utiliza las reservas que tiene de minerales alcalinos como por ejemplo el calcio, con lo que hace que paradójicamente el consumo de alimentos como la leche de vaca sea precursor de osteoporosis; la reacción de dichos minerales con los ácidos produce sales como el urato de calcio que luego se acumulan en los tejidos blandos y en las arterias y pueden producir arteriosclerosis u otras disfunciones; nuestra saliva tiene ptialina, una sustancia química que digiere los almidones y que no tiene la saliva de los animales que están más adaptados a la digestión de proteínas animales. Hay un largo etcétera, como por ejemplo la cantidad de porquería que le echan a los animales y que luego se acumula en su carne y pasa a nuestro cuerpo.

Para no alargar más el tema de la alimentación, resumiré que los alimentos que acidifican el cuerpo son las carnes (y en general, los productos que vienen de animales), las harinas muy refinadas o las que vienen del trigo, los alimentos que llevan gluten, el café, el alcohol, algunas frutas muy concretas como el plátano (por el tipo específico de azúcares que lleva), el azúcar refinado (el integral tiene minerales necesarios para nosotros), las comidas pesadas, las comidas demasiado cocidas o las muy procesadas.

En cambio, los alimentos alcalinos suelen ser más verdes, más frescos y más “vivos”, como la mayoría de las verduras y sus jugos.

Si los médicos dicen que hay que comer de todo imagino que será saludable siempre y cuando haya

más proporción de alimentos alcalinos que acidificantes en nuestra dieta, lo cual no significa que hay que dejar de comer carne, pero sí que tendría que representar un máximo de un 9% de nuestra dieta.

Hay que usar el sentido propio y no es recomendable pasarse a ningún extremo. Por sobre todos los consejos debes realizar los cambios cuando estés en sintonía con tu alma, trátate bien en tu evolución a la consciencia maestra.

NOTA: en mi país Uruguay recomiendo las charlas, cursos y talleres brindadas por el Ingeniero Agrónomo Fernando QUEIROS sobre temas relacionados.



En mi blog, encontraras temas para tú propio crecimiento interior. Si has llegado hasta aquí no es por casualidad. Tu decides si deseas quedarte.... Gracias por Ser y por estar. Reciban ahora mis bendiciones en AMOR Y SABIDURÍA DIVINA. Milton Ballesteros Maestro de Reiki

martes, 12 de diciembre de 2017

La cura se encuentra en la cocina

La cura se encuentra en la cocina.
Nunca en el restaurante por más natural y vegetariano que sea.
Nunca en viandas por "encargo".
Mucha gente pretende curarse con la nutrición pero no desea aprender a cocinar.
Pone cientos de creativas excusas para no aprender a cocinar.
Son como niños mimados.
Que quieren ir a Disney pero no quieren ni saber de los gastos que deben hacer los padres para darles el gusto.
Podemos controlar un tumor con la nutrición.
Sin quimio.
Podemos revertir una cardiopatía sin fármacos.
Podemos curar una autoinmune sin inmunosupresores.
Sólo con la nutrición.
Pero no es suficiente con que sea una buena nutrición.
O que sea sana y preparada con amor por mamá.
Para que reemplace a la quimioterapia, a los antiarrítmicos o a la cortisona-prednisona......
La nutrición ha de ser excelente.
Y se debe estudiar con verdaderos maestros de cocina.
Y no aprender con audaces que se lanzan a enseñar buscandose la vida.
Cuando el alimento tiene una calidad excelente.
Con excelentes ingredientes.
Excelente técnica culinaria.
Excelente preparación del/a chef.
Podemos esperar cientos de milagros de curación.
Que ocurrirán en tal número que sorprenderán al mundo.
 Reflexión del día 5/12/17
Doctor Martin Macedo
Desde aquí doy las gracias a los lectores y seguidores del blog, desde lo más profundo de mi corazón, por leer las publicaciones, por vuestros comentarios, por vuestra confianza, por vuestro apoyo, y sobre todo por vuestro cariño, es recíproco. Muchas gracias por estar!

miércoles, 13 de septiembre de 2017

Alimentacion consciente. Los peligros de comer carne roja

Para una verdadera salud integral debemos velar por nuestra alimentación. 

Por tanto , dejad de comer carnes rojas...pero si hay que comerlas, intentemos que sean cada vez mas en "ocasiones especiales".
Y cuando esten maduros dejarlas por completo en beneficio de nuestra salud y de nuestra alma.
Los Maestros ascendidos prohiben a sus discipulos personales comer cerdo o productos derivados, tales como fiambres o embutidos.
Sustituir de a poco por carne de pollo y pesacdo son un sustituto aceptable para dietas de transicion usados con moderacion.

El Maestro Ascendido el Morya una vez dijo con tono algo sarcástico:
"Si comeís carne roja, haced 30 minutos de llama violeta durante 3 o 4 horas después de comer, para restaurar la vibración espiritual de vuestro cuerpo y recibir un mayor beneficio de vuestra comida". 
Cuando os libréis del exceso de acidez causado por las carnes rojas, seréis menos propensos a enojaros, seréis menos obstinados e irritables y seréis menos propensos a entrar en discusiones.
Y poco a poco os veréis atraídos hacia el centro de vuestro corazón mediante la prescencia dominante del Señor Cristo.

Los peligros de comer carne roja (primera parte: desde una perspectiva de la medicina) 



Martes, 21 de Enero 2014  
Las enfermedades intestinales (cáncer del aparato digestivo, enfermedades inflamatorias intestinales, diverticulitis del colon…) vivieron un importante aumento en el siglo XX. Es muy probable que la causa principal fuera el incremento en el consumo de carne roja de mala calidad: embutidos y carne procedente de granjas industriales, etc.

Hasta 1945 la carne era todo un lujo y no se comía más de dos veces por semana; hoy en día está siempre presente en nuestros platos. En los restaurantes prácticamente ya se da por hecho: quitando aquellas ocasiones en las que tomamos pescado, siempre toca carne. Y al que elige un plato de verduras casi se le mira raro.  
Sin embargo, las estadísticas son claras: en todos los países en los que el consumo de carne roja aumenta, las enfermedades digestivas también lo hacen.

(1) Cáncer de colon Allí donde crece el consumo de carne de vaca, la incidencia de cáncer de colon es mayor. Puede que la explicación sea que la carne de vacuno contiene virus resistentes a la cocción. Pues bien, al cocinar este tipo de carne, aparecen nitrosaminas cancerígenas. Los virus de la carne atacan la pared de los intestinos, creando así infecciones listas para convertirse en cáncer bajo los efectos de las nitrosaminas. Hay que señalar que al cocinar pollo o pescado también aparecen nitrosaminas cancerígenas, pero su consumo no incrementa el riesgo de cáncer de colon. Eso se podría explicar por la ausencia de virus en este tipo de carne que ataquen las paredes de los intestinos. El cáncer también podría originarse por el hierro hemo que se encuentra en la carne roja, ya no sólo de vaca, sino también de ternera, cordero, cerdo, pato, oca, conejo, caballo y también en las vísceras.

(2) El hierro oxida las células, el ADN, los lípidos y las proteínas intracelulares, lo que a largo plazo parece favorecer la aparición del cáncer.

(3) Según un estudio realizado entre 88.751 mujeres, comer carne de vaca, cerdo o cordero una vez al día de media multiplica por 2,49 el riesgo de sufrir cáncer de colon, en comparación con las mujeres que consumen este tipo de carne menos de una vez al mes.

(4) Otras enfermedades provocadas por el consumo excesivo de carne. El consumo de carne favorece la aparición de la enfermedad de Crohn (enfermedad inflamatoria del intestino delgado). En este caso, lo que ocurre es que la carne que no puede ser absorbida en su totalidad por el intestino delgado (que comienza después del estómago y termina en el colon) pasa al colon, donde fermentará por efecto de las bacterias de la flora intestinal. Esta fermentación produce derivados tóxicos que atacan a la mucosa del intestino, lo que puede provocar las hemorragias, diarreas y terribles dolores abdominales característicos de la enfermedad de Crohn.

(5) El colon, que nace al finalizar el intestino delgado y que acaba por degradar los restos del contenido alimenticio ya digerido, también puede desarrollar, por efecto de la carne, pequeñas bolsas en donde se atascan las materias fecales. Como puede imaginarse, esto no es nada limpio y provoca infecciones, o incluso una perforación intestinal que produciría en el peor de los casos una peritonitis. La diverticulosis es otra afección del intestino grueso -que normalmente se desarrolla en el colon- característica de la alimentación occidental rica en carne, y aparece con mucha menos frecuencia entre los vegetarianos.

(6) En el caso de las mujeres, la carne aumenta el riesgo de endometriosis (presencia de tejido endometrial fuera del útero). Un estudio de 2004 demostró que las mujeres que consumen más carne roja tenían el doble de probabilidades de padecer endometriosis.

(7) Por otro lado, el consumo diario de 100 gramos de carne aumenta en torno a un 20% el riesgo de generar una diabetes de tipo 2.

(8) Además, la aparición de enfermedades cardiovasculares, cáncer de estómago, de vejiga y Alzheimer también está relacionada con el consumo de carne.

(9) ¿De qué está hecha la carne que comemos?
No obstante, hay que procurar no demonizar a un alimento que desde tiempos inmemoriales forma parte de la alimentación humana.
El problema podría estar provocado en gran medida por la pésima calidad de la carne que se consume en la actualidad. Hoy en día, para aumentar la productividad se alimenta a los animales con maíz, cereales o harinas animales a menudo enriquecidos con aditivos.
Sabemos que se crían en unas condiciones de hacinamiento inconcebibles y que, en algunos casos, incluso son sacrificados de una forma tan horrible que el ex Beatle Paul McCArtney llegó a declarar:

“Si las paredes de los mataderos fueran de cristal, todo el mundo sería vegetariano”. 
Nos encontramos muy lejos de la imagen del feliz rebaño pastando hierba en verdes prados, que son las condiciones de vida naturales de las vacas, y eso podría claramente explicar los efectos nocivos del consumo de carne en nuestra salud.
Por todas estas razones y muchas otras más que buscan proteger el medioambiente, Jérémy Anso, del sitio web sobre nutrición Dur à Avaler, recomienda enérgicamente no sobrepasar los 300 gramos de carne por semana, lo que equivale a dos hamburguesas o a una ración grande en un restaurante.
La verdad es que esta recomendación me parece de lo más sensata.

NOTA ACLARATORIA: Algunos lectores han contactado con nosotros planteando sus dudas y preguntas en relación al texto de saludnutricionbienestar.com que publiqué la semana pasada sobre el consumo de carne roja y su posible relación con la enfermedad de Crohn. Algunos de ellos aseguraban que se trata de una enfermedad genética en la que la alimentación no juega ningún papel.

Agradezco a todos los lectores que se hayan dirigido a nosotros y, como es un asunto importante (sobre todo pensando en las miles de personas que sufren la enfermedad) me parece necesario aclarar que, a día de hoy, no hay estudios concluyentes en cuanto al origen de la enfermedad de Crohn, que sigue siendo desconocido.
Por lo tanto, el posible origen autoinmune y/o genético está aun por demostrar, pues hay una sospecha, pero no una demostración científica. De hecho, algunos estudios apuntan a que dado que la incidencia de la enfermedad es mayor en los países industrializados, sería probable que la dieta que se hace en estas zonas pudieran intervenir como desencadenante de la respuesta inmunitaria intestinal que conlleve a la inflamación intestinal crónica. La alimentación es compleja para un paciente con un Crohn. En la mayoría de las guías dietéticas se asegura que aunque la carne roja no provoca el Crohn su consumo puede precipitar las crisis y, por tanto, se desaconseja su consumo. Como en la enfermedad hay una pérdida sustancial de proteínas se recomienda que éstas se obtengan a partir de carnes blancas, de pollo y pavo, pescados, leche y huevos.

No hay que perder de vista que la alimentación tiene una poderosísima influencia en nuestra salud.

Dado el interés que ha suscitado este asunto, me comprometo a tratarlo en un próximo post.

Fuente:http://www.saludnutricionbienestar.com/los-peligros-de-comer-carne-roja/
Dra Ludivine. La viande favorise-t-elle les maladies intestinales? 22.07.2012 L’ordonnance ou la vie! Tappel, Al. 2007. Heme of consumed red meat can act as a catalyst of oxidative damage and could initiate colon, breast and prostate cancers, heart disease and other diseases. Medical Hypotheses 68 (3): 562–564. doi:10.1016/j.mehy.2006.08.025. Cross, A. J., L. M. Ferrucci, A. Risch, B. I. Graubard, M. H. Ward, Y. Park, A. R. Hollenbeck, A. Schatzkin, et R. Sinha. 2010. A Large Prospective Study of Meat Consumption and Colorectal Cancer Risk: An Investigation of Potential Mechanisms Underlying this Association. Cancer Research 70 (6) (Marzo 9): 2406–2414. doi:10.1158/0008-5472.CAN-09-3929. Willett, W C, M J Stampfer, G A Colditz, B A Rosner, et F E Speizer. 1990. Relation of meat, fat, and fiber intake to the risk of colon cancer in a prospective study among women. The New England Journal of Medicine 323 (24) (Diciembre 13): 1664–1672. doi:10.1056/NEJM199012133232404. Maconi, Giovanni, Sandro Ardizzone, Claudia Cucino, Cristina Bezzio, Antonio-Giampiero Russo, et Gabriele Bianchi Porro. 2010. Pre-illness changes in dietary habits and diet as a risk factor for inflammatory bowel disease: a case-control study. World Journal of Gastroenterology: WJG 16 (34) (Septiembre 14): 4297–4304. Aldoori, Walid, et Milly Ryan-Harshman. 2002. Preventing diverticular disease. Review of recent evidence on high-fibre diets. Canadian Family Physician 48 (Octubre): 1632. Parazzini F, Selected food intake and risk of endometriosis. Hum Reprod. Ago 2004;19(8):1755-9. Epub 14 Jul 2004. An Pan, Qi Sun, Adam M Bernstein, Matthias B Schulze, JoAnn E Manson, Walter C Willett, Frank B Hu; Red meat consumption and risk of type 2 diabetes: 3 cohorts of US adults and an updated meta-analysis. American Journal of Clinical Nutrition, primera publicación el 10 de agosto de 2011: 10.3945/ajcn.111.018978. Cross, A. J., L. M. Ferrucci, A. Risch, B. I. Graubard, M. H. Ward, Y. Park, A. R. Hollenbeck, A. Schatzkin, et R. Sinha. 2010. A Large Prospective Study of Meat Consumption and Colorectal Cancer Risk: An Investigation of Potential Mechanisms Underlying this Association. Cancer Research 70 (6) Desde aquí doy las gracias a los lectores y seguidores del blog, desde lo más profundo de mi corazón, por leer las publicaciones, por vuestros comentarios, por vuestra confianza, por vuestro apoyo, y sobre todo por vuestro cariño, es recíproco. Muchas gracias por estar!

miércoles, 5 de abril de 2017

7 tés y plantas para aliviar la ansiedad

La ansiedad es un problema que cada vez es más común… 

El estrés que se acumula nos genera ansiedad.
Es muy importante aprender a aliviar la ansiedad porque nos puede provocar diversos síntomas como problemas digestivos, dolor muscular, cansancio, mareos, entre otros.
Los tés y algunas hierbas pueden ayudarnos a calmar nuestra ansiedad y también a dar alivio a los síntomas.
Recomendaciones generales para aliviar la ansiedad
Existen algunas formas de reducir la ansiedad de nuestras vidas, entras la cuales podemos considerar las siguientes.
Ejercicios de Respiración: Una forma de liberar el estrés consiste en poner en práctica ejercicios de respiración que nos ayudan a calmarnos.
Lleva una dieta saludable: los nutrimentos adecuados favorecen un buen metabolismo y nuestro cuerpo está expuesto a menos toxinas.
Actividad física: Realizar una actividad física regular puede ser útil para combatir los efectos del estrés y además, nos ayuda a liberar endorfinas, sustancias que se relacionan con la sensación de bienestar.
Comparte tus problemas: Hablar con alguien de tu confianza acerca de los problemas que te agobian puede ayudarte a reducir tus niveles de estrés, incluso si no pueden ofrecerte una solución, ya que el simple hecho de hablarlo puede aliviarte.
Descansa: Tener una mala calidad de sueño o dormir pocas horas, puede contribuir a la ansiedad y al cansancio, por lo que es importante buscar dormir bien. 

Los tés y las infusiones: básicos para aliviar la ansiedad.
Ciertas plantas pueden servirnos para combatir la ansiedad y reducir sus síntomas, sin embargo, se trata de un complemento que debe combinarse con otros enfoques de tratamientos para tener una mayor efectividad.
Las bebidas a base de hierbas conocidas como tés e incluso el extracto de estas plantas recomendadas pueden ser buenas aliadas contra la ansiedad, pero debemos ser conscientes de que se trata de un alivio temporal.
La ansiedad debe tratarse desde su origen, buscando la forma de limitar el estrés al que estamos expuestos y contrarrestándolo con diversas medidas.
Si quieres optar por el consumo de infusiones para combatir la ansiedad evita elegir tés o bebidas que contengan cafeína, una sustancia estimulante poco recomendable en caso de padecer ansiedad.
Disfrutar de una bebida agradable: beber té puede ser relajante incluso si sus activos no tienen estos efectos, ya que disfrutar de una bebida fría o caliente resulta agradable.
Una buena taza de té caliente nos puede reconfortar durante el invierno e incluso antes de dormir, mientras que el té helado es refrescante.
Lo cierto es que tomar té con calma puede hacernos pasar un momento agradable.

7 Bebidas que ayudan a aliviar la ansiedad:
1. Té de Valeriana Este té posé propiedades calmantes en casos de ansiedad y puede emplearse para reducir el estrés, es gracias a estas propiedades que el té de valeriana se emplea para combatir el insomnio de forma natural, ayudando a promover el sueño profundo. Se recomiendan beber tres tazas al día para calmar la ansiedad y sus síntomas, sin embargo, no debe consumirse por un periodo prolongado.
2. Té de tilo Quizás uno de las plantas más comúnmente empleadas para combatir la ansiedad, son las flores de tilo, cuyo té se consume a fin de calmar los nervios y favorecer el sueño reparador. Se puede tomar una taza de té de tilo diariamente para calmar la ansiedad.
3. Té de manzanilla Es conocido que la manzanilla tiene propiedades relajantes que pueden ayudar a calmar al sistema nervioso y aunque su efecto puede ser considerado leve debemos considerar que es fácil adquisición y seguro de consumir con frecuencia. Se pueden beber de una a dos tazas de té de manzanilla al día para combatir los síntomas de la ansiedad.
4. Pasiflora Utilizada para relajar los músculos y calmar los cólicos menstruales, la pasiflora puede constituir un remedio contra la ansiedad, normalmente se comercializa su tintura o ben su extracto para este fin.
5. Melisa Esta planta tiene propiedades relajantes que resultan importantes a la hora de combatir el estrés y la ansiedad, favorece un estado de relajación que propicia un buen descanso. Por otro lado la melisa también tiene propiedades analgésicas por las que puede ayudarnos en caso de dolores musculares leves, como los que se presentan después del ejercicio.
6. Hierba de San Juan ó Hipérico Esta planta es conocida por sus efectos beneficiosos en caso de depresiones leves, ayudando a mejorar nuestro humor. El hipérico puede consumirse en forma de té para buscar la calma al nerviosismo, sin embargo, se aconseja evitar consumos excesivos o prolongados pues se trata de una planta con posibles efectos adversos.
7. Espino Blanco Se trata de una planta con propiedades sedantes, indicada para tratar casos leves de nerviosismo, el espino blanco tiene un efecto hipotensor que podría ser aliado incluso para pacientes que sufren de hipertensión, además puede ser de utilidad para favorecer el buen sueño en casos de insomnio. Normalmente se puede consumir el espino blanco en extracto o bien en tintura.

Fuente: MIRE plantas-medicinales.es